Grandes frases: «El silencio de los corderos»
Ver «El silencio de los corderos» siempre me ha parecido una experiencia de lo más rara. Uno no puede dejar de sentirse atraído por la trama, a pesar de los elementos sórdidos que nos muestra, pero sobre todo me maravilla un hecho: cómo consiguieron el director, el guionista y el actor que un personaje tan malvado como Hannibal Lecter nos resultara tan fascinante.
«Uno del censo intentó hacerme una encuesta. Me comí su hígado acompañado de habas y un buen chianti.»
Anthony Hopkins en «El silencio de los corderos«
(«The silence of the lambs«, Jonathan Demme,1991)
¡Escalofriante!
Sólo por las miradas del doctor Lecter y la agente Starling, ya merece la pena ver la película entera, pero aquí os dejo la escena, que son sólo dos minutos:
Si, grande. Pero cambia de la versión original.
https://www.youtube.com/watch?v=A6gClalBxbw
Ese deje con el acento, y la vocecilla aflautada de la voz que pone Hopkins, transmiten otro tipo de miedo, me pone los pelos de punta. El doblaje, cambia bastante la sensación, no se si será cultural o no, pero esa voz profunda, con un tono intelectual, culto, independientemente del contenido, la voz de Camilo Garcia (lo podeis escuchar en los anuncios de Seguros Ocaso), es otro tipo de sensación.
Pasa lo mismo con Constantino Romero y Clint Eastwood, aunque en ese caso me quedo con Constantino.