Reseña: «El renacido»

Por fin fui a ver «El renacido«, la película de la que todo el mundo habla, la que se lleva las mejores críticas y los principales premios en ceremonias y festivales. Aunque aún no sabemos qué pasará en los próximos Óscar, aquí va mi opinión sobre la cinta.
Para aquellos que no la hayáis visto todavía, os diré, sin desvelar nada, que la película transcurre en torno a 1820 en el norte de los Estados Unidos, y se centra en la lucha por la supervivencia del guía de una expedición y su búsqueda de venganza por el asesinato de su hijo.
Lo primero que debo decir es que la película es especialmente violenta. Probablemente tengo el defecto de que la violencia haya dejado de afectarme cuando la veo en el cine, pero en el caso de esta película no pude contemplar algunas escenas. La crudeza en algunos momentos y la muestra de forma explícita de heridas me resultaron desagradables y me recordaron (por si alguno de vosotros la visteis en su momento) a la película «La Pasión de Cristo«, que dirigió Mel Gibson en 2004.
Sin embargo, a la pregunta de si esa violencia es gratuita o no, probablemente diría que no. Las heridas a las que se enfrenta el protagonista y la dureza de los combates en los que participa nos ponen en situación: a pesar del estado en el que se encuentra, a pesar de la poca probabilidad de sobrevivir después de lo sufrido, el guía hace lo imposible por seguir vivo para dar caza al asesino de su hijo.
Dejando a un lado lo cruento de «El renacido«, la película es -a la vez- increíblemente lírica. Su ritmo pausado y su gusto por detenerse en contemplar la naturaleza, contrastan con la violencia de algunas escenas, con la dureza de las condiciones de vida en aquel lugar, con la amenaza de los indios y la ferocidad de los animales salvajes. La importancia de las montañas, de los árboles, de los ríos hace de «El renacido» algo orgánico, algo vivo que además nos convierte en diminutos en comparación con la grandiosidad del entorno.
Esta contraposición entre la parsimonia y la agitación hace de alguna manera dinámica a la cinta y esto se consigue también gracias a la música de Riuychi Sakamoto, con mucho protagonismo de percusión y cuerda, que nos trae ecos orientales como los que consiguió en otras partituras como «El último emperador» o «Pequeño Buda«.
Sobre el reparto parece haber una opinión unánime en crítica y público: Leonardo DiCaprio lo da absolutamente todo en su papel de Hugh Glass. El esfuerzo que demuestra resulta más que evidente y casi nadie duda en que esta vez, después de otras cuatro nominaciones, el protagonista de «Titanic» conseguirá el Óscar a mejor actor en la ceremonia de entrega del próximo día 28. Pero además de DiCaprio en «El renacido» brillan también Tom Hardy y Forrest Goodluck, asesino y víctima que son el origen del deseo de venganza.
Y he querido dejar lo mejor para el final. Para aquellos a los que os gustan los temas técnicos, disfrutaréis con «El renacido«: la inmensa mayoría de los planos de la cinta están rodados casi a la altura del suelo, de tal manera que la norma en la película es el contrapicado. Árboles, animales y personas, a todos ellos los vemos desde abajo: una perspectiva que no es novedosa, pero que da un punto muy original a la película y confirma esa sensación de que, frente a la naturaleza, los humanos somos minúsculos.
Como veis, «El renacido» tiene muchos alicientes para ir a ver: las actuaciones son excelentes, la fotografía de Emmanuel Lubezki deja sin aliento, la música ayuda para que la inmersión en la acción sea completa y la mezcla de diferentes ritmos confirman un trabajo impresionante de un director en pleno auge, el mexicano Alejandro G.Iñárritu. Sin embargo, dejaría la advertencia de que su nivel de violencia convierte a esta película de aventuras en una no del todo apropiada para todo el mundo.
«El renacido» («The Revenant«, Alejandro G. Iñárritu, 2015)
«El renacido»: películas que me han venido a la cabeza.
Mientras veía «El renacido» no he podido evitar acordarme de otras películas que comparten de alguna manera el género, las localizaciones y la excelente banda sonora. Se trata de «Bailando con lobos» y «Leyendas de pasión«.
Me pasó exactamente lo mismo. La violencia casi me hizo rechazarla por completo pero el trama y estas vistas son demasiado increíbles. Y con ojos cubiertos durante uns momentos si se puede verla! 🙂
Hice exactamente eso: taparme los ojos en algunos momentos 🙂
Gracias por tus comentarios en cada post y por compartir las entradas, Lisa 😉